Actualmente aproximadamente un 20% de la población presenta durante su vida una reacción alérgica adversa alimentaria.
En las últimas décadas ha ido aumentando la preocupación por las alergias alimentarias, siendo esta considerada como un importante problema de salud pediátrica en los países occidentales, debido no solo al potencial de gravedad durante las reacciones sino también al drástico incremento de la prevalencia.
La alergia alimentaria es una reacción anómala del organismo con una causa inmunológica comprobada después de consumir un alimento o uno de sus derivados o auditivo contenido en el mismo.
Cada vez más personas adultas y niños sufren esta enfermedad y hay que tener un conocimiento adecuado de la materia debida a su importancia y gravedad.
En la población en general esta entre un 1% y 3% pero en niños menores de 3 años la frecuencia aumenta a un 8% según datos de estudios recientes.
Hoy en día uno de cada 25 niños es alérgico algún alimento.
La alergia una vez que se desarrolla por primera vez aparecerá cada vez que se ponga en contacto con dicho alimento, de ahí a la necesidad de realizar una dieta donde se evite este alimento.
Pueden producirse reacciones graves y en algunos casos fatales, por lo que se considera de suma importancia la colaboración de todos los implicados: pacientes, familiares, alergólogos y pediatras, asociaciones de pacientes, administraciones publicas y empresas alimentarias, con el fin de conseguir que los niños puedan desarrollar una vida con las menos posibles limitaciones.
Los primeros síntomas si son leves y se carece de información son difíciles de interpretar, de ahí la importancia de la formación.
Por primera vez las alergias en las instalaciones escolares han provocado un caos por la dificultad de predecir la gravedad por los síntomas iniciales y de algunos fallecimientos por alergias debido al retraso a la hora de administrar adrenalina intramuscular por la falta de conocimiento de ello. De ahí la importancia de que todo personal escolar reciba formación suficiente sobre el reconocimiento y el tratamiento precoz de las reacciones alérgicas para que se pueda administrar la medicación de urgencia adecuadamente y sin retraso, la formación de estos es imprescindible.
Todo personal implicado ha de ser consciente de que pequeñas cantidades de un alérgeno pueden afectar gravemente a la salud.
Disponer de un personal formado para informar a todo el personal del centro antes de que el curso comience, es necesario, ya que en el aula, en el patio, en actividades extraescolares, en el comedor, etc, se pueden dar este tipo de reacciones.
Algunas noticias sobre casos de reacciones alérgicas en el entorno escolar:
- http://ccaa.elpais.com/ccaa/2014/05/08/madrid/1399530491_294004.html
- http://www.lavozdegalicia.es/hemeroteca/2002/05/30/1105376.shtml
“La salud se crea y se vive en el marco de la vida cotidiana; en los centros de enseñanza,
de trabajo y de recreo. La salud es el resultado de los cuidados que uno se dispensa a sí
mismo y a los demás, de la capacidad de tomar decisiones y controlar la vida propia y de
asegurar que la sociedad en que uno vive ofrezca a todos sus miembros la posibilidad
de gozar de un buen estado de salud.”
Carta de Ottawa, 1986
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